Cosas veréis, amigo Sancho.

lunes, 30 de enero de 2012


Así es. Cosas veréis le decía don Quijote a Sancho Panza y nosotros con los cabecillas de la trama Gürtel, defensores del caciquismo franquista que han sentado en el banquillo al Juez Garzón por ordenar escuchas de la trama y a sus defensores. ¡Qué vergüenza para España, el hazmerreír de la justicia!

La Plataforma contra la Impunidad del franquismo acudió a apoyar a Garzón, presentó en el registro del Supremo, escrito para pedir la dimisión de la Sala de lo Penal que juzga a Garzón, entre los que estaban, Pilar Barden con la portavoz de la Plataforma, entregando un documento en que se solicita “justicia democrática” para las víctimas del franquismo. Llamazares de Izquierda Unida valoró el juicio como un “linchamiento político”.

La trama en prisión de Francisco Correa y Pablo Crespo, de la derecha caciquil en el PP, blanqueadores de fondos en paraísos fiscales a través de sus abogados Manuel Delgado y López Rubal, imputados en la causa; las grabaciones gracias a las cuales se frustró la intentona de Correa de obtener la nacionalidad en Argentina o Panamá para sustraerse a la acción de la justicia.

Garzón, explicara ya al abogado autor de la querella Ignacio Peláez, conspirador político de la derecha, que las escuchas se habrían hecho siempre salvaguardando el derecho de defensa y con el apoyo de la Fiscalía.

¡Cosas veréis, amigo Sancho! y aquí están con blanqueo o sin blanqueo de capitales, falsedad, cohecho y tráfico de influencias, pero no importa, porque el “sabio pueblo” protege a los chorizos.

No hace falta mirar más que a los medios de comunicación del mundo entero para darse cuenta de la grave crisis judicial española, consecuencia inequívoca de la “conspiración política” para eliminar a Garzón y a aquellos “elementos” que no interesan en la esfera judicial. Le seguirán otras ya lo veréis.

0 comentarios:

Sobre este blog

"Soy humano; nada humano me es ajeno". Terencio

"Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista.
Luego vinieron por los judíos y no dije nada porque yo no era judío.
Luego vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista.
Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante.
Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie que dijera nada".
Martin Niemoller

Síguenos en: