Empezaron ya...

Desde que los votantes españoles les votaron y consiguieron “mayoría absoluta”, el Gobierno del PP, comenzó inmediatamente a desmantelarlo todo: “Rajoy quita Educación para la Ciudadanía por su  adoctrinamiento” para contentar a los sectores fundamentalistas religiosos. También, advierten, que habrá tres años de Eso, tres de Bachillerato y Formación Profesional también se reformará. Esto para empezar.

Los cambios provocaron, aunque no importe al PP, la reacción de las organizaciones de padres, que no pintan nada en esta santa novena. Estos cambios se suman al anuncio de la reforma de la Ley del Aborto.

El ministro del Interior “ofrece generosidad” a los presos de ETA, mientras que Rodrigo Rato, ex compañero de Rajoy y presidente de Bankia, critica el plan financiero del “eje cativo” viéndoles más próximos a los intereses del Banco Santander y BBVA, dentro de la grave crisis financiera, sin importarles un ápice de la miseria humana de más de 5.300.000 de parados y no sabemos cuántos desahuciados. Porque, saben que tienen la sartén por el mango y si los parados no tienen trabajo que se jodan y si los desahuciados no tienen vivienda, que se refugien debajo de un puente, que al día de hoy hay bastantes. Rato, al que se le vio el plumero, da a entender que el plan del Gobierno favorece los planes de Emilio Botín y Francisco González para que el resto de “competidores” tengan que ofrecerse en “plan ganga” al mejor postor y evitar la quiebra. Esto es el problema: “El dinero”, lo demás no interesa.

La ratonera que dicen sentir los “jefes de las cajas” es que se les fuerza a nuevas fusiones en un momento en que nadie las quiere, sin ayuda pública.

Tomen nota: “Nos jugamos el futuro, dice el ministro de Economía”. Cristóbal Montoro: “Queremos superar la crisis lo antes posible, pero necesitamos tiempo”. Posiblemente este tiempo que dice Montoro, sea para que el 80% de la población se haya convertido en pobres de solemnidad y los 20% restantes los oportunistas de la nueva política española, convencidos del “crecimiento del futuro” y de una economía saneada y sostenible a cambio de la miseria y el hambre de tantos españoles. Este es y no otro, “el pan de cada día, dánoslo hoy” de la Iglesia Católica Española, que es la que pinta y mucho en el PP.

Imagen: Emilio Botín y Francisco González.