TRABAJANDO POR LA ESPERANZA

viernes, 15 de julio de 2011

Amigos: Resulta fácil dejarse llevar por la desesperación, por la negatividad, criticarlo todo, acomodarse frente al televisor y dar una lección de ética a cualquier amigo que aparezca por ahí, sobre este “mundo” que al parecer no tiene remedio. La naturaleza, amigos, puede parecernos muchas veces mezquina y absurda, contradictoria y repulsiva. Si es cierto, pero, amigos, cuando uno piensa en los “pequeños milagros” que se consiguen día a día gracias a la ciencia, por ejemplo, que hacen la vida de tanta gente mejor y más llevadera, es ver que hay razones para creer, para confiar todavía en esta “extraña humanidad” que junto a los actos más terribles que a diario se ven en televisión y otros medios de comunicación, de este lamentable planeta global, es también capaz de hacer otras cosas hermosas que jamás podríamos imaginar. Así es la esperanza, gracias a la labor de las personas científicas, y no científicas, que se dedican a lo más valioso que tiene la vida, a hacer cosas por los demás.

Ciertamente que hay muchas que anónimamente lo vienen haciendo. La esperanza, amigos, sin fundamento acaba por ser frustrante, pero el esfuerzo y la perseverancia de todos a la hora de enfrentarnos a la actual situación del mundo global, nos atrevemos a deciros que no os rindáis porque las generaciones más jóvenes serán capaces de obtener y consolidar el futuro más social y humano. Así será.

0 comentarios:

Sobre este blog

"Soy humano; nada humano me es ajeno". Terencio

"Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista.
Luego vinieron por los judíos y no dije nada porque yo no era judío.
Luego vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista.
Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante.
Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie que dijera nada".
Martin Niemoller

Síguenos en: